El MACD (Moving Average Convergence Divergence), o Convergencia/Divergencia de Promedios Móviles, es uno de los indicadores más populares y versátiles en el análisis técnico. No solo nos ayuda a identificar la dirección de una tendencia a corto y mediano plazo, sino que su mayor fortaleza radica en detectar cuándo esa tendencia podría estar perdiendo fuerza.

En este artículo, desglosamos cómo funciona este oscilador y cómo puedes utilizarlo para mejorar tu toma de decisiones en el mercado.

¿Qué compone el MACD?

Para entender el indicador, primero debemos conocer sus tres piezas fundamentales:

  • Línea MACD: Es el resultado de restar dos promedios móviles exponenciales (EMA): el de 12 periodos (rápido) y el de 26 periodos (lento). Esta diferencia nos muestra la relación entre el corto y el mediano plazo.
  • La Señal (Signal): Es un promedio móvil exponencial de 9 periodos calculado sobre la propia línea MACD. Actúa como un suavizador para generar cruces y señales.
  • El Histograma: Representa gráficamente la diferencia entre la línea MACD y la Señal. Cuando ambas líneas se cruzan, el histograma es cero.

Interpretando la Tendencia

El MACD oscila alrededor de un eje cero, lo que nos da una lectura rápida del mercado:

  • Tendencia Alcista: Cuando el promedio de 12 periodos está por encima del de 26, la diferencia es positiva y el MACD se ubica por encima de cero.
  • Tendencia Bajista: Si el mercado cae, el promedio rápido (12) cruza por debajo del lento (26), llevando al MACD a ubicarse por debajo de cero.

Aunque los cruces entre el MACD y la Señal pueden sugerir compra (cruce hacia arriba) o venta (cruce hacia abajo), estas señales pueden ser falsas en mercados laterales. Por eso, el verdadero secreto de este indicador está en las divergencias.

El Poder de la Divergencia

La divergencia ocurre cuando la acción del precio y el indicador «no se ponen de acuerdo». Es una de las señales más potentes para anticipar un posible cambio de tendencia.

1. Convergencia (Lo normal)

En una tendencia saludable, el precio y el MACD se mueven en la misma dirección. Si el precio hace máximos más altos, el MACD también debería hacerlo. Esto confirma la fortaleza de la tendencia.

2. Divergencia Negativa (Cambio a Bajista)

Ocurre cuando el precio de la acción sigue subiendo y marca picos más altos, pero el MACD comienza a marcar picos más bajos. Esto indica que el impulso alcista se está agotando y anuncia la posibilidad de un cambio a una tendencia bajista.

3. Divergencia Positiva (Cambio a Alcista)

Es el caso contrario. Se da cuando el precio cae marcando mínimos más bajos, pero el MACD marca mínimos más altos. Aunque el precio sigue bajando, el indicador nos avisa que la fuerza vendedora disminuye, sugiriendo un posible rebote o cambio a tendencia alcista [05:07].

Conclusión

El MACD es mucho más que un simple cruce de líneas. Incorporar el análisis de divergencias en tu estrategia te permitirá filtrar mejor las operaciones, ayudándote a decidir si confiar en la continuación de una tendencia o prepararte para un giro inminente.